Los retos y oportunidades tecnológicas del 2020

Empezamos el año con la oreja puesta en el CES 2020 de Las Vegas, la feria tecnología más importante del mundo y la primera de cada año. En ella, se presentarán los desarrollos tecnológicos que nos acompañarán todo el año.

Antes de sumergirnos en todas las novedades que están por venir, vamos a dedicarle un tiempo a reflexionar y ver la implicación de las tendencias tecnológicas y las consecuencias de estas en la sociedad futura, y concretamente en este año 2020.

IA interrelacionada con otras tecnologías

La inteligencia artificial seguirá siendo tendencia este año, cada vez más integrada con otras tecnologías como la robótica o la automoción. Es un hecho que cambiará el rumbo de empresas e industrias. Por el ejemplo, con los conocidos gemelos digitales: replicas virtuales de un producto, servicio o sistema real que permite adelantarse a los posibles problemas y experimentar sin correr riesgos con esta especie de ‘simulación’ que contribuirá en la toma de mejores decisiones.

 

 

Sin lugar a duda, la inteligencia artificial será una de las grandes protagonistas de este año, no solo por su disparada evolución y desarrollo, si no por los problemas éticos y jurídicos a los que con ella nos enfrentamos. Por el lado positivo, nos ayudará a mejorar la ciberseguridad de particulares, empresas e instituciones. La IA contribuirá a mejorar en la prevención frente a los ataques, pero la inteligencia artificial es un arma de doble filo, que posiblemente también influirá en la eficacia de los ataques.

Asistentes virtuales más sofisticados

Los asistentes virtuales serán cada vez más sofisticados, actualmente ya los encontramos en muchos dispositivos como electrodomésticos, móviles y ordenadores, también en automóviles y hogares, pero cada vez estarán más interconectados, y tendrán mayores capacidades. El objetivo final es que cada vez se automatizarán más procesos, tanto en ámbito personal como en el laboral y mejorará la experiencia de usuario.

Transformación digital de las empresas e ‘impuestos tecnológicos’

Durante estos años se está hablando mucho de la destrucción de puestos de trabajo convencionales y de la creación de otros nuevos que ni siquiera conocemos. Es importante recalcar que esa destrucción de puestos de trabajo también influirá en los puestos de trabajo cualificados. En materia laboral, estamos en un proceso de transición tecnológica, y posiblemente en un cambio de modelo.  

Una de las grandes incógnitas es la fiscalidad relacionada con la tecnología, debido a que el empleo se está transformando, se está volviendo más tecnológico. Continúa la transformación digital de las empresas, que se enfrentan a tomas de decisiones entre los costes y las previsiones a largo plazo. Determinadas tareas, aunque automatizadas, sigue siendo más rentable que las desarrollen personas, sin embargo, otras inversiones como en logística o análisis de datos, dejarán fuera a muchas empresas competidoras.

Educación continua

La educación es un pilar fundamental para adaptarnos al cambio. Estamos inmersos en un continuo aprendizaje, que debe ser una parte más de nosotros. La educación se adapta a los individuos, con las nuevas plataformas y formas en las que se presentan los contenidos. Pero nosotros también debemos adaptarnos a las continuas exigencias de la sociedad y del mercado. El termino reciclarse, está siendo sustituido por un aprendizaje continuo, además no solo de materias sino también de habilidades. 

Privacidad y ciberseguridad

Cada vez se generan más datos entorno a las personas y pese a que la legislación intenta regular el uso que hacen compañías e instituciones con ellos, los ciudadanos aún no están suficientemente concienciados de lo que supone entregar sus datos a terceros.

El pasado 2019, salieron a la luz casos de manipulación política en redes sociales como en la votación del Brexit o en las elecciones estadounidenses. O casos de acoso escolar o laboral por videos personales difundidos en empresas y colegios. Los datos son nuestra intimidad y generamos tal cantidad de ellos que es casi imposible controlarlos. Es necesario reflexión, educación y un debate global sobre el valor que le damos a nuestros datos personales y el futuro de la intimidad en la sociedad digital.

Energía y medio ambiente

El sector energético también está experimentando grandes cambios, entre ellos el autoconsumo y la unión con otras tecnologías. En el 2020, la tecnología y la energía estarán muy relacionadas, por ello en Anexia Tecnologías y Consultoría, estamos preparado varias líneas de trabajo para acercaros los cambios en la regulación a los consumidores y empresas. Así como las nuevas tendencias y la actualidad del sector.

El medio ambiente es uno de los puntos principales para tener en cuenta a la hora de generar energía, el objetivo es generar energías limpias. Las renovables son la gran apuesta para lograr este objetivo. En España, las principales energías renovables son la eólica y la fotovoltaica, que dependen del clima, de ahí la gran importancia de unión con tecnologías como big data e inteligencia artificial. La industria está creando modelos predictivos que mejorarán la toma de decisiones, la gestión y el almacenamiento de la energía.

El cambio no solo está en las fuentes de energía, sino también en la gestión de estas. El autoconsumo eléctrico ha venido para quedarse, y cada vez son más los consumidores que generan la electricidad, sobre todos con placas solares.

La conectividad 5G

Acabamos 2019 con la revolución 5G a la que le queda mucho recorrido en el 2020 y en años venideros. La conectividad a través de redes inalámbricas prometer ser cada vez más avanzada. La quinta generación de conectividad móvil inalámbrica será más rápida y permitirá acceder a la nube en tiempo real, descargar archivos de gran formato de forma instantánea y llegar a lugares remotos, entre otras.

Este 2020 veremos desarrollos tecnológicos en todos los ámbitos de nuestra vida, en automoción, salud, formación, también se colarán en nuestros trabajos, en nuestras casas y en lugares que ahora no podemos ni imaginar. Pero también nos enfrentamos a cambios globales, políticos y sociales, en los que la tecnología debe posicionarse como una aliada, una herramienta que mejore la vida de las personas.